El año pasado, 2011, finalizó con un déficit del estado español en torno al 8,5 %. Es decir, el estado gastó un 8,5 % del PIB por encima de sus ingresos. Según el Partido Popular, ello había sido un despilfarro por parte del anterior gobierno del señor Rodríguez Zapatero, una sinrazón; el estado no debe gastar más de lo que tiene era la idea fuerza del señor Rajoy, su slogan repetido una vez y otra.
Bien, pues resulta ahora que nos presenta este mismo señor un proyecto de gasto del estado en el que resulta un déficit del 5,8 % del PIB. Es decir el estado se gasta más de lo que tiene casi en la misma cuantía que el impresentable señor Rodríguez Zapatero. El irresponsable gasto por encima de las posibilidades, el despilfarro imperdonable, se diferencia en el 2,71 % del PIB
Hombre, podremos decir, este nuevo gobierno despilfarra menos…
Pero sigue despilfarrando y endeudando al país. Así no vamos a ninguna parte buena.
Paguemos de una vez por todas nuestras deudas aun a costa del patrimonio nacional en su totalidad y ajustemos de verdad nuestros gastos nacionales a los ingresos nacionales. Si hacen falta gastos extraordinarios, pongamos impuestos extraordinarios, pero no pidamos prestado, por favor. No queremos deuda nacional. No es otra cosa sino una máquina para bombear dinero del humilde contribuyente al poderoso financiero.
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